Este recinto alberga una variedad muy amplia de artesanías propias de todos los estados de la república. Cuenta con 4 salas de exhibición permanente, las cuales se dividen en esencias del arte popular, vida cotidiana, arte popular y lo sagrado, y por ultimo el arte popular y lo fantástico.
El lugar es muy bonito, está lleno de color, de muchísimas artesanías que representan la esencia de la cultura mexicana; en el museo puedes admirar toda la diversidad que existe en el país.
En los distintos niveles del museo, encontramos piezas de barro, de cerámica, palma, vidrio, plata, madera y papel, entre otros materiales. Había representaciones en miniatura de los estilos de vivienda, representaciones de la muerte, un pequeño circo, metates y molcajetes gigantes.
Había un sin fin de pequeñas artesanías que eran muy coloridas, llenas de vida, que te transmitían vitalidad. En una de las secciones del museo estaban la indumentaria típica de cada región, por ejemplo la yucateca, purépecha, los tarahumaras y otomíes, por mencionar algunos.
Afuera de las salas, colgadas por los pasillos se encontraban piñatas y alebríjes, muy ingeniosos por cierto, porque iban desde peces o serpientes, hasta representaciones del mundo actual y pirámides a escala.
El propósito de este museo y las exposiciones que presenta, es hacer que el arte no muera, que no quede en el olvido, sino que todos tengamos oportunidad de conectarnos con nuestras raíces, de volver a reconocernos, saber que nuestro país es inmensamente rico en cultura. Lo que se pretende con la difusión de las artesanías en el museo es dignificar el arte popular y fomentarlo.
¡Sin duda un lugar que hay que visitar!
Sin duda una exoeriencia unica
ResponderBorrar¡Pienso lo mismo!
BorrarEs uno de los museos que más me agradó debido a la cantidad de objetos curiosos que se exponen en el museo.
ResponderBorrar¡Fue genial!
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