domingo, 18 de noviembre de 2018

Cuentos Voladores (9)


Narración oral y otros cuentos.

Para muchos es extraño escuchar las palabras Narración Oral, pues creen que nunca han tenido contacto con ella. No podrían estar más equivocados, la oralidad nos ha acompañado en nuestra historia como seres humanos desde nuestros inicios. Mi nombre es Aníbal Hoyos y soy el “narrador volador”. En este  espacio estaré compartiendo mis actividades y presentaciones referentes al arte de contar historias. Pero antes que nada, vamos iniciar por el principio, como todo buen cuento. Definiremos lo que es Narración Oral, lo que no es y las infamias culturales que se cometen.

Narra… ¿Qué?



La narración oral es una de las formas de comunicación humana más antiguas que existen. Siendo su origen la tradición oral en las comunidades antiguas, es decir, aquellas historias que se contaban por la voz de los abuelos alrededor de una fogata o a la llegada de los juglares.  Actualmente existen artistas que llevan al máximo esta práctica. El brujo, el anciano de la tribu ha maravillado a personas que quieren ser sus iguales en este mundo moderno. Son los guardianes de la palabra y esta no tiene un límite temporal.  No soy un maestro, así que mis opiniones están a discusión, pero les comparto también la Entrevista a Marcela Romero, una de las mejores Narradoras de México. 

 Es importante aclarar que no es lo mismo Narrador Oral y cuentacuentos. En las presentaciones que he tenido las personas cometen el error de usarlos como sinónimos (lo que no me molesta de hecho) , cuando éstos tienen ciertas diferencias muy importantes, aunque ambas se relacionan en más de un momento, aquí van sus características:


Cuentacuentos: Es aquel artistas que se especializa en contar historias para niños de una edad de kínder y primaria. Suele acompañar su presentación con varios recursos como: títeres, disfraces, canciones, actos de magia, entre otros.

Narrador Oral: Se trata de un artista que domina el “arte de contar historias” a través de su voz, cuerpo y expresiones faciales. Normalmente no requiere de recursos y cuando los implementa es en cantidades mínimas. Aquí está el reto, pues si quieres decirle al público que de tu mano sale fuego, no necesitas hacer una llama de fomi y pegártela, ¡debes hacer que el público se lo imagine! Otra característica es que se narran los subgénero literarios más importantes:

Leyenda: Todos debemos conocer la definición de esta. En mi opinión es una de mis favoritas, especialmente las de terror. Aquí yo tengo un problema muy grande porque cuento una historia que me encanta mucho sobre una bruja de Papantla y en verdad asusta a los niños a los que se la he contado, pero como me enseñó mi maestro, Iván Zepeda Valdés, El cuentero Cordobés, si uno de esos niños se espanta y busca consuelo y te pide que confieses que es ficción, no te queda de otra que decirle que es verdad y que la bruja anda por ahí… Duele, pero el narrador debe cumplir su trabajo. Si tú no te lo crees y lo sientes, el público tampoco lo hará.

Mito:  Uno de los que menos he explorado en mis cuatro años contando, pero me gusta llamarlo, el abuelito de los otros, pues fueron las primeras historias contadas por la humanidad.

Fábula: Aquí tenemos al feo del grupo, al que dicen que es el adoptado. A mi maestro  y a mí no nos gusta por una sencilla razón: va en contra de la misión del narrador. ¿Cuál es esa misión? Se los contaré con una anécdota.

Hace un tiempo dos narradores y yo fuimos invitados al WTC de Boca del Río a contar en un congreso para 2300 jóvenes, era algo titánico. No hablaré mucho sobre eso porque lo contaré en otro post. Ahora bien, las organizadores estaban nervioso porque casi todos eran conferencistas y nosotros “cuentacuentos” (No te enojes, Aníbal), así que decidí responderles de la siguiente manera: “No tengo nada en contra de los conferencista, pero la mayoría te presenta, después de toda su historia de vida, una serie de reglas que debes cumplir para alcanzar el éxito como ellos lo hicieron. Ignoran por completo que hay más de un camino y diferentes versiones del éxito. No hay fórmulas. Y cuando se trata de jóvenes, su espíritu rebelde te manda a hacer lo contrario a lo que te dicen, en cambio, un Narrador te cuenta una historia y al final no te dice la reflexión o la razón de porqué te cuenta esos sucesos en particular. Eres tú el que descubre uno de los muchos significados o mensajes que puede tener la historia, y cuando tú conseguiste algo, cuando tú encontraste tu propio camino y enseñanza con esfuerzo, lo valoras más, porque es sólo tuyo”. Por eso las fábulas están hasta abajo en mi lista de favoritos, porque al final de su composición obligan al lector o al espectador a aceptar la enseñanza que querían trasmitir, en lugar de darle liberta de interpretación.

Cuento: El género favorito de todo narrador y la razón de que nos digan cuentacuentos (cuenta hasta tres…). Aquí quiero decir que no me gusta decir cuento infantil, cuento para adolescentes… porque he comprobado que son universales. Lo resumo con algunos imágenes de frases de mi tocayo, Jairo Aníbal Niño, el poeta de los niños.

Relato: Aquí el narrador cuenta algo que le pasó, en muchas ocasiones lo adorna, pero siempre se busca que el relato sea muy atractivo gracias a la historia que de origen ya era interesante. Por eso es que se decide contar un relato en primer lugar.


Sucedido: El sucedido también es algo de la vida real, pero que le ocurrió a un conocido. Aquí pasa  lo mismo que con su hermano el relato. En otro post hablaré de mi experiencia mágica con este. Por ahora les pido que recuerden la frase del gran E. Galeano: “Dicen que los sucedidos, sucedieron alguna vez, o casi sucedieron, o no sucedieron nunca. Pero lo bueno que tiene es que suceden cada vez que se cuentan”. Esta frase es con la que inicia todas sus presentaciones la gran narradora uruguaya, Lorena Álvarez, de quien también comentaré en otro momento.
La aventura. Marcela Romero.

No quiero hace el cuento tan largo. Mi intención es que primero nos familiaricemos con los términos y después muestre algunas de las actividades que he hecho en estos cuatro años. Así que por ahora digo, colorado colorín, este cuento llegó a su fin.

3 comentarios:

  1. Que buen cuento ¿o narración? Que huidiza está la línea de separación entre las dos. Felicidades querido Aníbal y muchas bienaventuranzas en tu hermoso camino. Cariños

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